Saltar la navegación

2. Importancia de la formación permanente

El individuo puede seguir formándose durante toda su vida, tanto si su situación es de desempleo como de empleado.

Cuando la persona se encuentra inserta en el mercado laboral y sigue formándose, a esta formación la denominaremos desarrollo profesionalDe esta manera mejora sus habilidades, valores y actitudes, es decir, sus capacidades personales y profesionales. Por ello podemos llegar a la conclusión de que el desarrollo profesional va a permitir una mayor profesionalidad debido al juicio crítico, el análisis y las consecuentes actuaciones más inteligentes, haciendo que el profesional crezca en muchos sentidos, como persona, en cuanto a conocimientos teóricos, prácticos, en experiencias y en perfeccionamiento.

Tendríamos que ser conscientes de que el aprendizaje de la profesión no se inicia con un curso de formación inicial y termina con la obtención de un título. No hay duda de que el cambio tan constante del entorno, la cultura social, la política, los adelantos tecnológicos y los nuevos sistemas organizativos, entre otros, hacen imprescindible un constante reciclaje a través de la formación permanente, y la adaptación constante a una sociedad cambiante. Algunos autores contemplan que la formación es un proceso que se puede realizar durante todo el ciclo vital profesional de modo ininterrumpido.

Pensamos que estos indicadores son fácilmente reconocibles si aplicamos la propuesta de Charlier (2005), consistente en la investigación-acción-formación, ayudando al técnico a desarrollar su adaptabilidad respecto a una variedad de situaciones.