7. Inversión socialmente responsable
La creciente preocupación por los desafíos sociales y ambientales del siglo XXI ha trascendido también al ámbito financiero. Las empresas que no integran la sostenibilidad a través de los criterios ASG o ESG tienen muchas menos probabilidades de ser viables y exitosas a largo plazo en comparación con aquellas que han adoptado esta tendencia.
Algunos grupos de inversión, conocidos como capitales socialmente responsables, son conscientes de ello y, al decidir dónde invertir su dinero, valoran estos aspectos. Como resultado, han surgido nuevos conceptos e índices bursátiles específicos en el mundo financiero.
Concepto de IRS
Tradicionalmente los inversionistas se han guiado por criterios económicos de rentabilidad, riesgo y liquidez. Sin embargo, en las últimas décadas ha surgido el concepto de inversión socialmente responsable (ISR), que, además de considerar los factores anteriores, incorpora criterios éticos, sociales y ambientales para tomar decisiones. Su crecimiento en los últimos años ha sido realmente significativo. Por lo tanto, ISR es aquella que, además de los aspectos financieros, tiene en cuenta factores ambientales, sociales y de gobernanza corporativa en el proceso de toma de decisiones.
Asimismo, existen fondos ISR caracterizados por incluir carteras de valores o bonos de gobierno que cumplen criterios de responsabilidad social y ambiental y excluyen acciones de empresas contaminantes, que fabrican productos nocivos para la salud o que emplean prácticas laborales no admitidas, como el trabajo infantil. Su objetivo es contribuir a una transformación social y ambiental hacia un mundo más justo, inclusivo y respetuoso con el medioambiente como medio para cumplir con los ODS y el Acuerdo de París presentes en la Agenda 2030, y al mismo tiempo mantener una rentabilidad financiera igual o superior a la de los fondos que no consideran estos aspectos.
Índices bursátiles relaciones con el ASG
Para guiar las inversiones, existen índices bursátiles o valores numéricos que muestran la variación estadística temporal de los precios de cotización en Bolsa.
Dado que los mercados perciben que las empresas que adoptan criterios de sostenibilidad tienen una mayor probabilidad de perdurar y, por lo tanto, representan un menor riesgo para los inversores, se han desarrollado índices bursátiles que evalúan aspectos ESG o ASG. Los más conocidos son:
- Dow Jones Soustainability Index: consiste en un conjunto de indicadores empleados para medir el desempeño sostenible de una empresa o su capacidad de integrar la rentabilidad con aspectos medioambientales y sociales.
- FTSE4 Good Index: es un conjunto de índices bursátiles de la Bolsa de Londres que evalúan a las empresas según criterios ASG o ESG.
- MSCI ESG: la compañía estadounidense MSCI (Morgan Stanley Capital International), dedicada a generar índices bursátiles, ha desarrollado un grupo de indicadores específicos destinados a identificar los riesgos ESG o ASG.
Otro instrumento que orienta a los inversores sobre actividades que responden a criterios ASG o ESG lo constituyen los informes de sostenibilidad.
Para abordar el cambio climático y cumplir con los ODS de la Agenda 2030, la Unión Europea ha desarrollado la Taxonomía Europea de Finanzas Sostenibles. Este sistema clasifica las actividades realmente sostenibles en seis áreas clave: mitigación y adaptación al cambio climático, uso sostenible y protección del agua y los recursos marinos, transición hacia una economía circular, prevención y control de la contaminación, protección y restauración de la biodiversidad y ecosistemas, y la transición a una producción y consumo energéticamente eficientes y limpios. Además, establece un sistema de medida homogéneo para cuantificar estas actividades y proporciona criterios objetivos para los inversores. Su intención es orientar los flujos de capital para facilitar la transición a una economía más sostenible.
La UE también ha introducido como herramienta de financiación ecológica los bonos verdes europeos, que son títulos de deuda destinados a financiar proyectos climáticos y medioambientales.